Puesto que los lentes de contacto son dispositivos médicos regulados por la FDA de EE.UU., su cuidado y mantenimiento son muy importantes. A continuación te incluimos algunas cosas que debes recordar sobre el mantenimiento de los lentes de contacto para que pueda aprovecharlas al máximo.

Respeta tu esquema de uso prescrito

No intentes prolongar el periodo de uso de tus lentes de reemplazo mensual utilizándolos una semana más. No merece la pena correr el riesgo. Los lentes de contacto están fabricados con diferentes materiales para sus distintos usos, y están aprobadas por la FDA de EE.UU. para cada situación.

Lentes de contacto: ¡trátalos con cuidado!

Los lentes de contacto blandos desechables se pueden rasgar. Manipúlalos con suavidad. Si se te rompe o rasga una lente, deséchelo. Además, procura no tocarlos con las uñas. Las uñas, además de ser afiladas, son un refugio excelente para todo tipo de bacterias.

Nunca compartes tus lentes de contacto

Compartir los lentes de contacto no solo puede propagar bacterias de una persona a otra, sino que los lentes están adaptados y graduados exclusivamente para su visión y su ojo.

Utiliza una dosis nueva de solución de limpieza para lentes de contacto cada vez

Nunca limpies tus lentes de contacto con agua del grifo. El agua corriente puede transmitir patógenos y bacterias que pueden causar infecciones.

Nunca te coloques los lentes de contacto en la boca. En la boca habitan diversas bacterias. Aunque muchas de ellas son buenas para nuestro sistema digestivo, no lo son tanto para nuestros ojos.

Frotar y enjuagar

Frota los lentes de contacto con solución nueva durante 5 a 20 segundos utilizando las yemas de los dedos. Enjuáguelos bien nuevamente usando solución de limpieza. Los investigadores han llegado a la conclusión de que el método “frotar y enjuagar” sigue siendo el mejor para mantener los lentes limpios y libres de microorganismos, incluso en el caso de los sistemas de limpieza en los que se indica que “no es necesario frotar”.

Mantén limpio el estuche portalentes

Lava los estuches después de cada uso y guárdalos abiertos y apoyados al revés en un lugar seco y limpio. La Asociación de Optometristas de Estados Unidos (American Optometric Association) recomienda cambiar el estuche portalentes al menos cada tres meses.

No duermas con lentes de contacto que no sean de uso prolongado

Los lentes de contacto de uso prolongado están diseñados con una tecnología especial para permitir que  pase más oxígeno a través del lente hasta la córnea. Normalmente, cuando estamos despiertos y tenemos los ojos abiertos, el oxígeno del aire atraviesa el lente y se transmite a la córnea a través de las lágrimas.

Cuando estamos dormidos, los lentes de contacto normales impiden que llegue una cantidad de oxígeno suficiente a los ojos. Esto puede provocar infecciones, úlceras y un crecimiento insólito de los vasos sanguíneos en las córneas.

Lee y sigue las siguientes instrucciones

Presta atención a las instrucciones de tu especialista, al instructivo que viene con los lentes de contacto y a todas las indicaciones de la solución para lentes de contacto y del estuche portalentes. Todos estos elementos forman parte de un sistema cuidadosamente concebido y diseñado para ayudarte a mantener tus lentes de contacto y tus productos para el mantenimiento de los lentes de forma que protegeran tus ojos y tu salud.

Nada de lo publicado en este artículo constituye un consejo médico ni pretende sustituir las recomendaciones de un profesional de la medicina o salud visual. Si tienes preguntas específicas, consulta a tu profesional de la visión.
Más artículos